Puerto Príncipe.- El brote de cólera, que ya mató a unas 220 personas en Haití, llegó a Puerto Príncipe, la capital, le confirmó a la BBC Aisha Bain, del Comité Internacional de Rescate en el país.
La funcionaria de la organización de ayuda aseguró que había cinco casos confirmados de personas infectadas en la capital, pero que habían sido aisladas.
Informó, además, que los enfermos habían estado en la zona de Artibonito, al norte de Puerto Príncipe, y después habían vuelto a la capital donde comenzaron a sufrir los síntomas.
"Estamos muy preocupados", dijo Bain, quien agregó que ahora tendrá que investigarse dónde estuvieron exactamente dichas personas y con quiénes estuvieron en contacto.
Las autoridades médicas de Haití confirmaron que unas 3.000 personas han sido admitidas en hospitales. Las enfermos padecen de diarrea, fiebre aguda y vómitos.
"Puede haber más"
En la capital se están preparando hospitales y equipo para purificar el agua, con el fin de evitar que la epidemia llegue a los campamentos donde se encuentran quienes sobrevivieron el terremoto del pasado enero.
Muchos de estos lugares están superpoblados y condiciones sanitarias pobles, por lo que se cree que ahí el cólera podría atacar con fuerza.
"Puede haber otros casos que no conozcamos. Es temporada de lluvias, los campamentos están superpoblados y rodeados de zonas muy pobres. Hay un gran riesgo de infección", aseveró Bain a la BBC.
Los médicos temen que la enfermedad pueda alcanzar el país vecino, la República Dominicana, que está en alerta por la posible propagación de la enfermedad.
Las autoridades afirman que el brote de cólera se produjo debido a que varias personas bebieron agua contaminada del río Artibonito, una arteria que cruza la región rural del país, y es utilizada por muchas personas a diario para cocinar o lavarse. La mayoría de los casos se estaban produciendo en la región de Artibonito, en el centro del país.
Zonas saturadas
Algunos de los pacientes afirmaron que se enfermaron tras beber agua de una fuente pública, pero otros aseguran que habían ingerido agua purificada.
El doctor Jhonny Fequiere declaró a la BBC que había visto morir a 28 pacientes y que su hospital en Marchand Dessalines estaba teniendo problemas para enfrentarse a la situación.
"Estamos tratando de cuidar a los pacientes, pero estamos agotando las medicinas y necesitamos cuidados médicos adicionales. Estamos dándolo todo, pero necesitamos más para cuidar de todos", dijo.
Las victimas varían en edades, pero los más afectados son los jóvenes y los más mayores.
Las agencias de ayuda humanitaria están enviando con urgencia medicamentos y suministros de sales para rehidratación a las zonas afectadas, en un intento por evitar que el brote se expande por la capital Puerto Príncipe.
"La prioridad para nosotros y nuestra mayor preocupación es aislar a los pacientes que ya han sido afectados por la enfermedad e informar a la población sobre como evitar el contagio", aseveró Rosa Crestani, una coordinadora de emergencias de la ONG Médico sin Fronteras.
Este es el primer brote de cólera en Haití en más de un siglo. Y es la peor tragedia que asola al país luego del terremoto que acabó con la vida de 250.000 personas y dejó a 1,5 millones sin hogar.
Decenas de miles viven todavía hacinados en tiendas de campaña con malas condiciones sanitarias y escaso acceso a agua potable.
El cólera causa diarrea y vómitos que conducen a la deshidratación y puede matar rápidamente si el afectado no recibe tratamiento. Sin embargo, con rehidratación y antibióticos puede ser fácilmente controlada.
(Fuente: BBCMundo)