CABECERA

Como Goliath: Presidente Irán desafió a Israel

“Los sionistas están destinados a desaparecer”

Tel Aviv.- “A la distancia de un escupitajo”. Con este aforismo hebreo describían ayer los habitantes de los poblados israelíes en su frontera con el Líbano, al espectáculo que se desplegaba ante sus ojos, cuando la caravana que trasladaba al archienemigo del Estado de Israel, el presidente iraní Mahmud Ahmadinejad, llegaba al poblado de Bint Jbeil, a solo tres kilómetros, acompañado desde el aire por dos helicópteros del ejército Libanés, frente a los cuales la fuerza aérea israelí emplazó dos helicópteros de combate.

El aforismo hebreo no se refería solo a la distancia que permitía observar la concentración de miles de adherentes al movimiento shiíta Hezbollah en la cancha de fútbol del poblado, sino a la sensación frente a lo que consideraban una abierta provocación, cuando Ahmadinejad llega a la ya legendaria fortaleza de Hezbollah donde murieron no pocos soldados israelíes, y es recibido como el padrino protector cuyas palabras pueden lograr la liberación de Palestina, borrar a Israel devolviendo a los sionistas a sus lugares de origen y hasta convertir al Líbano en un Estado fundamentalista islámico.

A la mañana, en Beirut, el visitante trató de guardar modales al conversar con el presidente Saad Hariri, a quien propuso una solución para la bomba de tiempo que constituye la muy próxima definición pública de la comisión internacional que estudiará el asesinato de su padre, el ex presidente Rafik Hariri en 2005, aparentemente en manos de Hezbollah. Pero, cerca de la frontera, a la tarde, Ahmadinejad volvió a sus declaraciones contra su enemigo favorito y advirtió que “los sionistas están destinados a desaparecer” y deben “retornar a sus países de origen”.

“Ustedes demostraron que su resistencia, su paciencia, su firmeza fueron más fuertes que todos los tanques y aviones de combate del enemigo”, clamó Ahmadinejad. “El pueblo de Irán seguirá a su lado”, agregó, mientras miles de seguidores de Hezbollah levantaban banderas del Líbano, Irán y su propia milicia.

Si bien portavoces oficiales israelíes omitieron cualquier declaración sobre la visita del presidente iraní en la frontera con Israel, sí se hicieron escuchar voces de la ultraderecha como la del diputado Arie Eldad, quien llamó a aprovechar la provocación de Ahmadinejad para eliminarlo, señalando que “este acto sería legítimo como el haber matado a Hitler en 1938, cambiando el rumbo de la historia y ahorrando ríos de sangre”.

(Fuente: El Clarín.com)