México, D.F.- El Cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, y el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, se encuentran en pleitos que alcanzaron los tribunales y rebasaron la cordura verbal que incluye palabras tales como "huevos" para referirse a la falta de carácter o "cavernal", en lugar de cardenal.
Y todo por los matrimonios gay, oficiales en el Distrito Federal desde diciembre pasado y ratificadas como constitucionales con todo y adopción de hijos por la Suprema Corte de Justicia, motivo por el cual Sandoval, uno de los principales opositores de la Iglesia católica, montó en cólera.
Dijo que Ebrard había sobornado a los ministros con tal de hacer realidad un hecho que los sacerdotes mexicanos consideran una "aberración".
"'Marcelo Ebrard junto con organismos internacionales maiceó a los magistrados de la Suprema Corte, que recibieron dádivas", aseveró.
En respuesta, los abogados del alcalde de la Ciudad de México – que aspira a la presidencia del país- acudieron al tribunal Superior de Justicia a presentar la demanda contra el cardenal de Guadalajara y el vocero de la Aquidiócesis, Hugo Valdemar, por presunto daño moral.
En tanto los jueces deliberan el futuro de la denuncia, el político y el cura no han escatimado en dimes y diretes en contexto.
Durante un evento de la industria panificadora, Ebrard tomó una cesta de huevos y ante los fotógrafos mencionó: "para que los vea Sandoval".
En respuesta, el Semanario Arquidiocesano de Guadalajara criticó a quienes creen que "la política debe estar emparentada con los huevos, con el poder, con la autoridad, con el mando, con el absolutismo, con la fuerza, con la represión, aunque no sean los huevos propios, sino prestados".
La cúpula católica ha tachado al alcalde de ser un intolerante e irrespetuoso que desprecia la religión. "Este no es un tema de si se le tiene fobia a la Iglesia Católica, es un tema de leyes", puntualizó Ebrard.
A la polémica por el tema se ha sumado el gobernador del estado de Jalisco, Emilio González, quien recientemente dijo que los matrimonios entre personas del mismo sexo "le dan asco".
(Fuente: La Opinión)