El presidente cubano Raúl Castro Ruiz se reunió ayer en La Habana con el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega y Alamino, acompañado de Mons. Dionisio García Ibáñez, arzobispo de Santiago de Cuba y presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.Al finalizar la reunión el diario oficial Gramma emitió un breve comunicado en el que señala que “en el encuentro se analizaron diversos temas de interés común, en particular el favorable desarrollo de las relaciones entre la Iglesia Católica y el Estado cubano, así como la actual situación nacional e internacional”.
El diario oficial también señala que en el encuentro participó Caridad Diego Bello, Jefa de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido. El comunicado no precisa los asuntos abordados en este encuentro ni el tiempo de duración.
Hace unas semanas, el cardenal Ortega pidió a Castro frenar el hostigamiento hacia las Damas de Blanco, esposas y familiares de los presos políticos cubanos, quienes solicitan la liberación de estos. Tras la mediación, este grupo de mujeres pudo marchar libremente.
Este encuentro precede a la visita que realizará a Cuba el Secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, el arzobispo Mons. Dominique Mamberti, del 16 al 20 de junio. Durante su estancia tiene previsto reunirse con las autoridades del Gobierno y presidirá los actos de celebración del 75° aniversario de relaciones entre la Santa Sede y Cuba.
Sobre este encuentro, la portavoz de las Damas de Blanco, Laura Pollán, ha manifestado que “es importante y lógico que (la Iglesia) se haya reunido en estos momentos con el señor Raúl Castro, porque todos conocemos que próximamente vendrá el canciller del Vaticano y deben, tanto Gobierno como Iglesia, preparar sus condiciones”.
“El mundo tiene sus ojos puestos en Cuba, y creo que la Iglesia puede hacer que muchas cosas cambien, cosas que nosotras y muchos ciudadanos hasta estos momentos no han podido”, dijo luego y añadió: “tenemos mucha esperanza, pero no podemos vaticinar nada.
(Fuente: Agencias)
