CABECERA

Jóvenes México creen Dios pero rechazan religión

En el futuro iglesias católicas quedarán vacías

Ciudad de México.- El 62 por ciento de los jóvenes residentes en el Distrito Federal afirma no practicar el catolicismo o alguna otra religión, aunque creen en Dios y no en los jerarcas de las iglesias.

La investigación, realizada por la agencia de análisis católica Adoremuslabs, se basó en sondeos realizados en las casi 900 parroquias de Ciudad de México, aunque de ellas se dice que solo un tercio posee grupo juveniles con un promedio de asistencia de unos quince jóvenes.

De este dato se desprende la primera conclusión: las iglesias católicas se están quedando sin jóvenes, de modo particular esta arquidiócesis, ya que un tercio de la población está comprendida entre los 18 y 35 años, lo cual equivale a casi tres millones de personas en el Distrito Federal, que supera los 14 millones de ciudadanos.

De los jóvenes que no practican el catolicismo, un 30 por ciento procede de colegios o universidades católicas; un 60 asistía a misa, pero alrededor de los 22 años como promedio, dejó de hacerlo. Y solo el 10 por ciento de los que no practican la fe consideran al catolicismo como la Iglesia Universal.

Espiritualidad particular

Adoremuslabs realizó el estudio sobre una población de 1084 jóvenes comprendidos entre los 18 y 29 años que no concurren a ningún grupo o comunidad religiosa. Un 43 por ciento afirmó que tenía cierta espiritualidad y otro 31 por ciento, que era tanto espiritual como religioso aunque no asistían, de manera regular, a ninguna parroquia.

La encuesta arroja, también, que el 40 por ciento no se identifica con la religión católica, un 16 por ciento dice pertenecer a algún club u organización que trae los mismos beneficios que asistir a una congregación y el 9 por ciento se considera ateo, humanista o realista, según las respuestas.

Finalmente, el informe dice que cuatro de cada cinco encuestados consideran, no obstante, que existe un ser superior y tres de cada cuatro proclaman la existencia de Dios presente en sus vidas a través de experiencias personales.

(Fuente: ACPress)