Guatemala.- La Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG) pidió hoy al Parlamento de este país centroamericano abolir de forma definitiva la pena de muerte, y calificó de "inmoral" a los políticos y grupos que promueven su aplicación.
"Los obispos de Guatemala censuramos como moralmente irresponsable la promoción de la pena de muerte como propaganda política", pues la desesperación ciudadana por la ineficacia del sistema judicial no se combate con esta medida, señaló la CEG en un comunicado.
Los jerarcas de la Iglesia católica denunciaron que "en la aplicación de la pena de muerte late a veces un deseo de venganza disfrazado de justicia", y consideraron que "la violencia no se combate con violencia cruenta ejercida bajo el amparo de la autoridad del Estado".
Además, expresaron su desacuerdo con el argumento de que la aplicación de la pena capital reducirá los índices de criminalidad que afectan a este país centroamericano, y calificó de "inmorales" y "falsos" los argumentos sobre que la pena de muerte acabarán con la delincuencia y el crimen organizado.
Algunos líderes políticos de oposición han insistido en los últimos meses sobre la aplicación de esa pena, bajo el argumento de que la misma es la única solución para disuadir a los criminales.
El presidente guatemalteco, Álvaro Colom, vetó el pasado 4 de noviembre una ley aprobada por el Parlamento, por medio de la cual se restituía el indulto presidencial para las personas condenadas a pena de muerte.
El gobernante argumentó que su Gobierno considera que la pena de muerte "no contribuye a mejorar la situación de seguridad en el país", y que la ley vetada "viola" varios artículos de la Constitución del país.
La pena de muerte está en suspenso en Guatemala desde el año 2000 debido al "vacío legal" que significa la falta de una definición sobre el indulto presidencial.
En la actualidad hay 41 reos condenados a muerte en Guatemala, por delitos de asesinato, ejecución extrajudicial y secuestro, entre otros.
Guatemala, Cuba y Estados Unidos son los únicos países del continente americano que contemplan la pena de muerte.
(Fuente: EFE)